12 de Mayo de 1958

Enajenación absoluta. Como si me hubiera ido de vacaciones dejando a mi cuerpo abandonado, o mejor, como si mi cuerpo se erigiera en único dueño de mí misma. No obstante, no quiero morir. Quiero continuar viviendo y mintiendo.
Todo lo verdadero se realiza cuando yo no miro, o cuando me doy vuelta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario